Ir al contenido principal

la puerta principal de duomo de milan

h







El Duomo de Milán más que una iglesia es un museo, es uno de los lugares imperdibles de cualquier viaje que realicen a Milán. Yo no soy muy amánte de los libros de guía turísticas pero realemente vale la pena comprar uno sobre el Duomo, para no perderse de las bellezas que posee.
En este post quería mostrarles sólo la puerta principal! y verán que sólo ella vale un estudio en sí misma.
Como cada parte del Duomo, la realización de las puertas principales tardó mucho tiempo desde la proyectación hasta la construcción final, se dice que se habló por primera vez de la construcción de estas puertas en el 1582, aunque no fue hasta el 1628 cuando se inició la construcción de los portales y sólo en el 1908 se ignauguró la puerta principal.
La puerta principal, como el Duomo, está dedicada a la virgen María, cada recuadro cuenta un capítulo biblíco. En ella, si la detallan con cuidado, podrán re-leer la biblia y vida de la virgen.

Dicen que para volver a Milán hay que tocarle el pie a Jesús preso en la columna (como se vé en una de las fotos), otros dicen que hay que tocar primero la del carcelero -de hecho está más lúcida-, yo les recomiendo ambas 🙂 ….
Otra curiosidad -que pueden ver en la fotos- son las marcas que dejaron las bombas de la segunda guerra



Comentarios

Entradas populares de este blog

quimeras o Gargolas de Notre Dame

Los diablos vigilan París . Unos con burla, otros con fiereza, e incluso alguno temeroso ante tan bella urbe. Esa es la impresión que me llevé al subir a lo alto de la  catedral de Notre Dame , a la galería de las quimeras o gárgolas, donde podemos observar unas de las estatuas más peculiares del mundo, y con un fondo de excepción: la Torre Eiffel, el Sena… En definitiva, la  ciudad de la luz . Con la emoción por ver en persona las quimeras, monstruosas estatuas que habitan lo alto de la catedral, el camino de desgastados escalones me pareció muy corto. Por fin, tras los innumerables giros de la mareante escalera de caracol, se veía la luz. Estaba a 46 metros de altura sobre París, al lado de diablos, demonios, trasgos, harpías, grifos y turistas, cámara en mano. Un grupito venido del mismísimo averno que ahí está, petrificado sobre el florido balcón de la catedral, mirando impasible cómo se desarrolla la vida bajo sus pies. mas i...

CATEDRAL DE MILAN MEGA CONSTRUCION

MAS INFORMACION MAS INFORMACION

vidrieras

mas informacion